domingo, 2 de mayo de 2010

Preocupada

Tuve un sueño.

Una niña pequeña (de 7 u 8 años) me decía que no debía tener miedo. Me decía que debía tener fe y no hacerle caso a los pensamientos negativos que comienzan a aparecer en mi cabeza. Me decía que debía creer pues me contaban la verdad.

Esa niña me enseñaba un espejo enorme en donde podía ver lo que sucedía en ese preciso momento. En el espejo (que por cierto, tenía un grabado de madera precioso) podía ver a mi novio junto con sus amigos. Estaban bebiendo y riendo. La niña tan solo dijo: “¿Ves?” y extrañamente yo me sentí más tranquila.

No puedo olvidar como era la habitación donde estaba el espejo: era oscura, sin ningún mueble, sin puertas y la única iluminación era un par de velas colocadas al lado del espejo.

Por algún motivo, cuando pienso en el sueño creo que esa niña soy yo cuando era pequeña. No se parecía en nada a mi, pero siento que era yo misma.

Cuando un sueño me llega, un sueño que me deja realmente impresionada, busco su significado. Será tonto, pero si creo en el significado de los sueños.

Esto es lo que me aventó el internet:

Espejo: Una mujer soltera que se sueña admirando a su amante en un espejo, insinúa que recibirá de él promesas de amor que tal vez, no son sinceras.

Niños: Soñar niños pequeños o bebés es siempre un buen símbolo que sugiere cosas buenas para el soñante en el futuro inmediato.


No se si deba creer esto.

Estoy: Asustada.
Escuchando: Nada.

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